24 Oct Viajar a Río de Janeiro
Río de Janeiro es una de las ciudades más impresionantes de América de sur, uno de esos lugares que no te puedes perder tanto si te gusta disfrutar de las playas, la naturaleza en estado salvaje, como si te gusta vivir la noche. En Río encontrarás una ciudad que te sorprenderá por su gente, su cultura, su historia…
Río de Janeiro es uno de los 26 Estados que forman Brasil. Su nombre cuenta que proviene de cuando los portugueses, liderados por Gaspar de Lemos, llegaron en 1502 a la ciudad por la Bahía de Guanabara, la confundieron con un río y como era el mes de enero, lo bautizaron con ese nombre. Ha pertenecido a Portugal hasta 1822 e incluso fue capital del Reino de Portugal desde 1807 hasta su independencia. Luego pasó a ser capital de Brasil hasta que en 1960 se cambió a Brasilia. Pero sigue siendo la segunda ciudad más poblada con una gran importancia financiera y turística. Sus habitantes reciben el nombre de Cariocas, que en la lengua indígena significa, los de las casas blancas, ya que cuando Napoleón invadió Europa, la realeza portuguesa se fue a vivir a la ciudad y sus casas eran construcciones blancas, se pueden ver en el barrio de Flamengo.
Pero comencemos nuestro recorrido por Río de Janeiro por sus playas. Hablar de Río es hablar de Copacabana, Ipanema, Leblon…
Copacabana se encuentra al sur de la ciudad, y recibe su nombre por la Virgen de Copacabana. Es una de los lugares más conocidos de la ciudad. En sus avenidas destacan sus aceras por su original diseño, sobre todo en la Avenida Atlántica, realizado por Burle Marx, famoso paisajista que ha realizado numerosas obras en la ciudad con influencia japonesa e inglesa. Podemos disfrutar de centros comerciales, hoteles de lujo, como el Copacabana Palace, galerías de arte y buenos restaurantes. Pero si quieres broncear tu cuerpo, su playa es el mejor lugar. Tienes más de 3 kilómetros de playa para disfrutar de todo tipo de lujos. No te puedes ir de Copacabana sin comprar un pareo con el estampado de sus aceras. En estas playas no se usan las toallas.
Ipanema, es otra de las playas más conocidas gracias a la canción «La chica de Ipanema» de Vinicius de Moraes y Antonio Carlos Jobim, que impulsaron la bossa nova en los años 60. Se encuentra en uno de los barrios más prestigiosos de la ciudad, lleno de boutiques, joyerías, discotecas y bares de moda donde gozar de la samba y de una buena Caipirinha . Es una de las zonas más caras para vivir. En sus playas podemos disfrutar de servicio de tumbona y sombrilla con una atención personalizada. Un placer que no te puedes perder.
Leblon se encuentra junto a Ipanema y al igual que este barrio, es un lugar de alto nivel económico. Lugar ideal para salidas nocturnas ya que sus bares, centros comerciales y discotecas están abiertos casi a todas horas. No te puedes perder sus maravillosas vistas desde su mirador.
Pero si te gustan las playas vírgenes y el surf, tu playa sin duda es Prainha. Se encuentra a unos 50 kilómetros del centro de Río de Janeiro, en un marco natural incomparable donde poder disfrutar de la naturaleza en estado puro y tomarnos agua de coco.
Pero Río tiene mucho más que ver. Es preciso conocer sus barrios, muy diferentes entre sí, pero están muy conectados. Para empezar, conocemos lo que son las Favelas, barrios de gente humilde y zonas conflictivas, en las que se mueven muchos narcotraficantes, zonas en las que mejor no adentrarse si no las conoces. Hay más de 900 en la ciudad, la más conocida es la Rocinha, por ser una de las más grandes. En su mayoría se encuentran en las laderas de las montañas, cerca de los barrios más característicos de la ciudad. Otros barrios que debemos conocer son el de Maracaná, para los amantes del fútbol un lugar que no se pueden perder ya que es donde se encuentra uno de los más famosos estadios del mundo, el barrio de Santa Teresa, barrio bohemio de la ciudad con mansiones coloniales, el barrio de San Conrado, lugar exclusivo en el que visitar su playa y sus casas como Villa Riso, Casa señorial del siglo XVIII construida con las ganancias del comercio de la caña de azúcar y que guarda en su interior verdaderas obras de arte de la época y por último el Centro Histórico de la ciudad dónde podremos admirar su Catedral Metropolitana de San Sebastián una de las más originales, obra de Edgar Oliviera de Fonseca en 1976, con 63 metros de altura que puede albergar en su interior a 20.000 fieles.
Una vez visitados algunos de sus barrios, vamos a visitar los lugares más emblemáticos de la ciudad, no sin antes degustar una feijoada para coger fuerzas.
El Parque Nacional de Tijuca es de los lugares más visitado. Es un bosque dentro de la ciudad. En este bosque podremos contemplar cascadas y cuevas, además del Corcovado, el pijo Tijuca de más de 1000 metros de altura y la Pedra de Gávea, el mayor monolito natural con 842 metros. Es un lugar impresionante donde la naturaleza y lo urbano se unen.
El Cristo Redentor es la imagen más conocida de Río. Desde lo alto del Corcovado, cerro llamado así porque parece una joroba, de la bienvenida a todos los visitantes. Esta imponente figura de 30 metros de altura de cemento armado se encuentra a una altitud de 700 metros. Hasta ella podemos acceder a través de un tren que nos llevará por un paraje maravilloso, el bosque de Tijuca, en el que podremos ver los monos que se pasean por la ciudad. Una vez llegados arriba, la foto junto al Cristo es obligada y después contemplar las vistas. Como curiosidad, dicen que el Cristo tiene un brazo más corto que él otro, cuando vayas fíjate bien.
Pero para poder ver unas vistas impresionantes, hay que subir al Pan de Azúcar. Este morro de 396 metros de altura nos ofrece una vista de la ciudad espectacular. Se puede acceder a él de dos formas muy peculiares, una a través de la escalada y otra por medio de un teleférico, inaugurado en 1912, que ofrece una visión panorámica mientras sube a este monumento de más de 600 millones de años. Dicen que su nombre viene por su similitud a los cuencos donde se colocaban las cañas de azúcar.
Pero no podemos irnos de Río de Janeiro sin conocer su Sambódromo situado en la Avenida Marqués de Sapucaí. Este lugar inaugurado en 1984, obra de Óscar Niemeyer, tiene una longitud de 700 metros, en el que hasta 88.000 espectadores pueden disfrutar del desfile que las diferentes escuelas de samba realizan durante el Carnaval de Río, uno de los mayores acontecimientos de la ciudad. Cada escuela desfila durante más de una hora mostrando sus trajes y cómo no, su arte en este baile.
En Río de Janeiro tiene mucho que conocer y disfrutar, esperamos compartas tu experiencia en esta ciudad con nosotros.
No Comments